domingo, 13 de enero de 2013

EN RECUERDO DE MILIKI

Hace unas semanas que nos dejó Miliki que en compañía de Fofo y Gabi nos hizo pasar momentos muy divertidos. Sus canciones nos han acompañado y seguirán haciéndolo en viajes y excursiones pues se han convertido en unos clásicos que entonamos a coro personas de distintas generaciones.

Armando Manrique Cerrato, poeta vallisoletano, plasma en su ¡Hasta siempre Miliki! todo lo que este simpático personaje ha supuesto para tantas personas.

Gracias Armando por tus versos.         

  ¡HASTA  SIEMPRE MILIKI!

          de Armando Manrique Cerrato


Dicen que se ha ido Miliki

que ha partido para el cielo

tocando el acordeón

con su música y sus cuentos,

con aroma a regaliz

a barquillo y caramelos.



Dicen que ha marchado, sí,

pero yo no me lo creo

puesto que él siempre estará

en la niñez que recuerdo

y en todos los corazones

de los que fuimos pequeños.



Ansiosos los esperábamos

a la vuelta del colegio

tras bajar del autobús

subir a casa corriendo

porque en aquella cocina,

la de blancos azulejos,

con el sabor de la infancia,

a Cola Cao recién hecho,

los payasos de la tele

nos visitaban de nuevo

transmitiendo así alegría

y emoción en blanco y negro.



Son Gaby, Fofó, Miliki

y Fofito, el más travieso,

con sus guardapolvos rojos

y sus curiosos sombreros

con sus grandes zapatones

y sus simpáticos gestos.



La actuación en el circo

era siempre lo primero

tras el ¿Cómo están ustedes?

que principiaba el evento;

nos hacía más mayores

tan ilustre tratamiento.



Después viene la aventura,

humor, intriga, misterio

y todas esas canciones

que felices nos hicieron

“Susanita, Don Pepito,

Mi barba tiene tres pelos...”

esas que tarareábamos

mientras íbamos creciendo.



Yo fui a verlos una vez,

a su Circo y ¡En directo!

Aún recuerdo la ilusión

de tan importante encuentro.



Han pasado muchos años,

mucha vida de por medio

hasta mis hijas cantaron

lo de “Vamos de paseo”

en el auto de papá

que iba entonces conduciendo.



Pues parece que Miliki

se ha marchado para el cielo

pero deja entre nosotros

inolvidables momentos

de galletas con Nocilla

Tigretón y Bucanero

con los clicks sobre la mesa

y los Geyper por el suelo,

entre caballos de plástico

y montones de tebeos,

la lección de subconjuntos

en aquel libro de texto

y el diagrama de Venn

dibujado en el cuaderno.



Así que amigo Miliki

junto con tus compañeros

siempre estarás con nosotros

te llevamos muy adentro

aquellos niños que fuimos,

que tal vez seguimos siendo,

cantaremos tus canciones,

compartiremos tus juegos,

y con tus viejas historias

otra vez sonreiremos,

porque vives en el alma,

en los más bellos recuerdos

y en todos los corazones

de los que fuimos pequeños.



2 comentarios:

Armando Manrique Cerrato dijo...

Muchas gracias, Julio y amigos del Colegio Príncipe de Asturias por publicar esta poesía en vuestro magnífico blog; es todo un honor para mí.
Espero que con esta querida figura de Miliki, los mayores recordéis los buenos tiempos de la infancia y los pequeños descubráis que también vuestros padres y maestros fueron niños hace mucho tiempo...

Quedo a vuestra disposición. Un fuerte abrazo

Rita dijo...

Eran todos unos payasos estupendos. Ahí nos han dejado su arte que nunca se pasará de moda.Siempre estarán en nuestro recuerdo. Muy bonito y entrañable el homenaje que les ha hecho Armando con su poema.
Un abrazo